viernes, 19 de junio de 2020

Bandidos Films / Luis Estrada


Por aquello del 2007 pasaba por un momento difícil en mi vida, y para apaciguar la desazón crónica, me sumergía en las películas. En esa época vi por primera vez Un mundo maravilloso, causándome gran fascinación, hoy en día no puedo escuchar la canción What a wonderful world de Louis Armstrong (que es la canción con que abre la película) sin sentir una onda nostalgia. Un mundo maravilloso se fue convirtiendo en un clásico personal, luego se las recomendé a mis hermanos y también les encantó. Poco tiempo después, me di cuenta que en la vídeo-club en la que solía rentar las películas, tenían una que estaba protagonizada por el mismo actor (Damián Alcázar) y dirigida por el mismo director (Luis Estrada), así es de que me decidí a verla, se trataba de la Ley de herodes. Esta otra película me dejó igualmente maravillado, definitivamente era el tipo de película para mí, luego me enteré que era todo un clásico del cine mexicano pues tuvo resonancia, controversia y fue multi-galardonada en nuestro país. Pasaron los años teniendo este par de joyas en mi historial, hasta que en 2010 se anunció el estreno de un nuevo filme con los mismos directores, actores, productores, etc: El infierno, película que también causó gran revuelo entre los espectadores, todo un fenómeno cinematográfico en nuestro país. Esta tercera entrega fue de gusto automático también, es de esos filmes que a todos gusta desde la primera vez. Hasta aquí ya me había dado cuenta de que estos filmes tenían varios elementos en común, por ejemplo la casa productora (Bandidos Films), el director y guionista: Luis Estrada, el protagonista fijo Damián Alcázar (cambiando de papel en cada filme), un elenco casi repetido o muy similar en cada película, entre los que destacan: Ernesto Gómez Cruz, Pedro Armendáriz Jr., Joaquín Cosio, María Rojo, Salvador Sánchez, Jorge Zárate e Isela Vega. Estos factores hicieron doblemente estimulante el ver y coleccionar estas películas.
Ya como fan de estos filmes, en 2014, se estrena la cuarta entrega: La dictadura perfecta. Esta última no me fascinó tanto como las anteriores, pero tuvo su mérito y valió la pena tenerla en cuenta, pues siguió con la línea de crítica social y política con un humor muy socarrón. Hasta ahí todo bien, hasta que llegó el más reciente filme: ¡Que viva México!, ese incluso nos lo fuimos a chutar al cine, pero la verdad que fue un bodrio comparado con las cuatro pelis que le precedieron. Aún así logró entretenerme la primera mitad de filme.  
Debo apuntar un añadido importante, existe un filme de antaño que por sus características generales, debe relacionarse con este universo cinematográfico, algunos no la contemplan, pero si se toma en cuenta que el director es el mismo, la temática en general también es afín y que tenemos la actuación de Alcázar y Armendáriz, debemos darle cabida. Al menos yo sí se la daré, estoy hablando de un filme que me enamoró en la infancia: Bandidos (1991). 
En fin, estas películas, en conjunto, son muy queridas por mí, muy apreciadas, las he visto en varias oportunidades, las he coleccionado en formato DVD y es una de mis colecciones más preciadas. Las películas de Bandidos Films / Luis Estrada / Damián Alcázar son lo mejor que yo pueda rescatar de todo el cine mexicano. Así es en mi caso, y no hay vuelta de hoja. Vamos con los detalles...


Bandidos (1991)
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Comenzaré, a modo de introito, con este filme que, aunque no es un precedente tan directo de La ley de Herodes, sí es una suerte de ensayo para la grandiosa pentalogía que Luis Estrada y Bandidos Films le legaría al cine mexicano. Bandidos fue una película que vi desde que era niño, me fascinó y siempre quise volver a verla, y aunque la perdí de vista, siempre permaneció en mis memorias pueriles. Sería muchos años más tarde, ya en plena adultez que me la encontré en YouTube y no desaproveché para volverla a ver y presentársela a mi pareja. En fin, Bandidos es una película que no te apasiona pero que no te deja de interesar. 

La ley de Herodes (1999)
✮✮✮✮
Esta película tiene un gran mérito que va más allá de la expectación cinematográfica, pues fue el primer filme que verdaderamente se atrevió a mostrar la horripilante cara del gobierno priista, y no sólo eso, sino que lo hizo en plena época electoral. Me atrevo a decir que esta película influyó a miles de votantes para negarle su voto al PRI. Pero fuera del asunto político, La ley de Herodes es una de las mejores película mexicanas de los últimos años, por su calidad actoral, guión y perfecta armonía entre humor y dramatismo. La ley de Herodes se hizo de la grandiosa cantidad de 11 premios Ariel incluyendo la categoría de Mejor película. Las actuaciones de Damián Alcázar, Pedro Armendáriz Jr. e Isela Vega son algo digno de encomio, 'actorazos' mexicanos de primer nivel desde mi particular punto de vista. El resto del elenco también se rifa, no hay mácula en las actuaciones, pero el guion es de primera también, y aparte de ser un guion bien interesante, las risas no paran, y en este aspecto uno le agradece en demasía a Doña Lupe (Isela Vega)... amo esta película.   


Un mundo maravilloso (2006)
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Esta es mi película favorita de la saga, al menos la más querida, la más entrañable. Como ya dije en la introducción, fue la primera que vi de esta tetralogía, y la que me acompañó en un momento de mucha desazón, eso significó mucho para mí, era una de las películas en las que me refugiaba. En fin, la película contiene mucha sátira política y social, el humor no es tan negro, pero vaya que sí me ha hecho reír demasiado. Pero lo mejor de todo son los personajes, cada uno de ellos tienen la chispa, la gracia, el encanto: Juan Pérez, el "Azteca", Don "File", el "Tamal", Rosita, incluso Lascurain y sus achichincles. Esta película la compartí con mis hermanos, luego con amigos, con mi pareja, con nuevos amigos... no desaprovecho para recomendarla; Es de esas películas que te sabes casi de memoria y que te inspira a decir algunas partes del guión como parte de tus guasas. Casi me atrevo a decir que esta es la película mexicana que más aprecio de toda la historia.          


El infierno (2010)
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Esta película es de esas que a todo mundo encanta o al menos llama la atención. El asunto es simple, pasa que la película te muestra con suma familiaridad la realidad mexicana actual (escenarios, lenguaje, idiosincrasia), aborda de una forma asaz amena el tema del narcotráfico, el cual de por sí ya es de mucho morbo entre los mexicanos. Pero la película no es burda ni morbosa por sí misma, aunque el tema y los personajes sí lo sean, pues fiel al estilo de Luis Estrada, la película conlleva una astuta y socarrona crítica al sistema y a la sociedad, un humor negro muy inteligente que logra captar la atención del público superficial pero también de la audiencia más crítica. A lo que quiero llegar es que esta película si bien no es un dechado de perfección cinematográfica, no aburre a nadie, a todos deja satisfecho. Al igual que La ley de Herodes, El Infierno también arrasó en la entrega de los 'Arieles' de su año. Película imperdible.


La dictadura perfecta (2014)
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Faltaba la crítica sardónica hacia la televisión mexicana (Televisa). La dictadura perfecta es la película que menos me fascina de esta tetralogía, pero no por ello quiere decir que no me guste. El guion pone en evidencia algo que era un secreto a voces en nuestro país, y me refiero a la ingente influencia de Televisa en la vida política de México, al punto de "postular" y casi imponer a cualquier candidato por muy vil, ruin y mediocre que éste sea. Aquí también Damián Alcázar logra una actuación destacada, demuestra que sin importar el perfil que maneje, tiene el talento de sobra para brillar.


¡Que viva México! (2023)
Algo muy especial de este filme, es que es la única que he visto en el cine en fechas de estreno. Así de botepronto diré que es la película más flojita que he visto de Luis Estrada y Bandidos Films, aunque tampoco creo que sea muy mala, finalmente tiene ese poder de enganche que caracteriza a Estrada, aunque a comparación del resto, esta sí llega a parecer una película desdibujada, redundante, un poco trillada y sobre todo extensa innecesariamente. La primera mitad de filme te mantiene entretenido, te arranca risas, te recuerda filmes pasados, pero cuando rebasas la mitad de película empiezas a pedir que termine; y aun cuando faltan algunos treinta minutos para acabar, sabes que ya es incorregible. Algo que me ayudó bastante a re-valorarla es que increíblemente a mi hija le encantó y la vio en Netflix varias veces; como yo la veía a fragmentos, pues me terminó por gustar un poco más.


        

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